Claves Nº 198 – abril de 2011
La
decisión del gobierno nacional de reconocer al Estado Palestino en diciembre pasado,
abrió interrogantes para la política exterior argentina, más allá de la
justicia y oportunidad de la medida. En esta columna abordamos varias veces la
confrontación palestino-israelí en sí misma y en el marco mayor del
enfrentamiento de Israel con los países islámicos, a cuya relectura remitimos[1]. La
presente nota apunta a las disquisiciones jurídicas respecto del reconocimiento
de estados, en las cuales subyacen obvias cuestiones relacionadas a las políticas
de poder.